jueves, 6 de enero de 2011

Termoeléctrica en Pichidegua: ¿Quién será el proveedor del combustible?

¿Cuál es la posible vinculación entre Fibroandes y la empresa que le proveerá el combustible para el funcionamiento de la termoeléctrica? 

Al inicio del año que ya se va, Fibroandes entregó un resumen ejecutivo del proyecto Central Tagua Tagua a la Municipalidad de Pichidegua, comuna donde se piensa instalar la termoeléctrica que funcionará con guano de pollo y viruta de madera, combustible conocido como Fibromix. 

 El documento indicaba que esta técnica 100% sustentable viene a aportar a la matriz eléctrica chilena una energía alternativa, agregándole valor a un desecho de otra industria, refiriéndose al excremento de las aves. Asimismo, precisa que el abastecimiento de este combustible será aportado por el “mayor productor de aves” de criadero de la zona. 

Si observamos las cifras, veremos que la termoeléctrica utilizará un promedio de 25 mil toneladas mensuales de Fibromix; de ellas el 90 % será de guano de pollo y un 10 % de viruta de madera o en algunos casos de podas agrícolas que contienen pesticidas. 

Es inevitable preguntarse cuál es el mayor productor de aves de criadero en la zona, la respuesta: Agrosuper. Entonces, qué vinculación o acuerdo pueden tener ambas empresas, si una de ellas le proveerá el combustible para el funcionamiento de la planta energética. 

Lo que no es posible es la confrontación o sinergia de intereses. Si miramos hacia el futuro, ¿qué beneficios concretos trae esta instalación para la zona, para la comunidad de Pichidegua? Sabiendo que el aporte energético de la planta a nivel país es de un 0,5 %, bastante bajo en comparación a la demanda anual del país que es de 58 millones de MW anuales. 

Veamos las cifras 
La Central Tagua Tagua producirá 35 MW, esto significa que cubrirá una demanda de 50 mil casas en el país, un índice bastante menor en relación a la necesidad. 

Por dar un ejemplo, en la actualidad la quema de biomasa o de residuos agrícolas y leña realizada por las casas de Pichidegua es de 25 mil toneladas. Si se llegara a instalar la termoeléctrica, ello subirá a 300 mil toneladas. Cuál es el aporte ambiental de esta práctica, si sabemos que el Fibromix, combustible o biomasa a incinerarse, libera a la atmósfera gases como el arsénico y la temida dioxina, altamente cancerígena, inodora e incolora, imperceptible para el hombre. 

A ello se suma la conocida situación de la Provincia del Cachapoal, considerada parte de ella como “zona saturada”, o dicho en otros términos, zona que no resiste un gramo más de contaminación. 

Qué hacemos. La comunidad tiene toda la capacidad y el poder para organizarse, sabemos que ya lo están haciendo. Pero no basta con ello, es primordial que las autoridades de las distintas bancadas se pronuncien más allá de un apoyo moral, como sucediera en octubre junto a la carta que entregaran los habitantes al Presidente Piñera. Si bien un paso importante es la buena conversación establecida con el Intendente. Ahora resta esperar las acciones que permitan un vuelco de esta historia y por cierto, la no instalación de la termoeléctrica en la zona. 

Más informaciones en www.pataguasintermoelectrica.cl/