En esta ultima semana comenzó aparecer en las medias lunas traseras de los buses de locomoción colectiva del Gran Valparaíso, un mensaje dirigido a los usuarios que dice “Sr. Pasajero cuide la tarifa rebajada, exija su boleto”. Este mensaje publicitado a través de todo el gran Valparaíso contiene varias impresiciones y falsedades implícitas, que el Ministerio de Transporte debería aclarar públicamente.
En definitiva se le pide al pasajero realice una acción fiscalizadora en la recaudación del cobro del servicio a favor del empresario, todo esto en un tono amenazante en que insta a cuidar “la tarifa rebajada”, si desmenuzamos el contenido de frase se puede concluir lo siguiente:
1. Que la tarifa existente ya es rebajada, lo que es falso ya esta se fijo por bases de licitación del Transvalparaíso hace varios años atrás.
2. que la tarifa se puede cambiar si no se exige el boleto, lo que también es falso pues las tarifas se reajustan mediante un polinomio matemático en función de las variaciones de diversos precios de los componentes de la tarifa como por ejemplo el valor del petroleo Diesel, de manera tal que las tarifas pueden subir o bajar.
3. que la tarifa la puede subir el empresario, lo que no es posible por que el calculo de la variación tarifaría la realiza el Ministerio de Transporte y es éste organismo el que fija la tarifa..
Estos mensajes entre líneas ayudan a desinformar a la comunidad y es la autoridad competente la que debe informar, si esta es competente por supuesto.
Lo que no dicen los mensajes públicos es que esta tarifa, si debiera ser menor por cuanto en su estructura se contemplo el uso de un GPS por cada bus, para controlar la frecuencia de pasada, GPS que aún ya en el termino del contrato nunca se incorporó, con esto se tiene que desde que se inicio el Transvalparaiso se ha pagado un valor por un servicio que no se ha entregado en su totalidad, al amparo de la autoridad que debiera velar por el bien común.
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