Arica,
Valparaíso, Temuco, Chillán, Santiago y Rancagua son algunas de las urbes que
hasta triplican los índices de material particulado recomendados por la OMS , que calcula en dos
millones las muertes anuales en el mundo por esta causa. Las medidas, dicen los
especialistas, no son efectivas mientras las ciudades sigan creciendo sin
límites. Radio U. de Chile 27 de septiembre de 2011.
Un
informe de la
Organización Mundial de la Salud determinó que trece ciudades chilenas
sobrepasan e incluso triplican los niveles de contaminación atmosférica recomendados.El
documento, de menor a mayor nivel de contaminación, contempló Arica, Arauco,
Valparaíso, Temuco, Concepción, Talca, Calama, Alto Hospicio, Chillán, La Calera , Antofagasta,
Santiago y Rancagua.
Según
la entidad, más de dos millones de personas mueren anualmente en el mundo por
la inhalación de pequeñas partículas que contaminan el aire. Las partículas
PM10, que fueron consideradas en este informe, pueden ingresar por los pulmones
y llegar al torrente sanguíneo. De esta manera, son causa de cardiopatías,
cáncer pulmonar, asma e infecciones agudas de las vías respiratorias.
El
director del Centro de Ciencias Ambientales de la Universidad de Chile,
Raúl Morales, comentó que nuestro país tiene particularidades geográficas y
climáticas, como las cuencas atmosféricas en los valles, que facilitan la
saturación.
“En
el lado argentino, tienes una gran cuenca de más de mil kilómetros planos, sin
un cerro, que hace que las condiciones metereológicas de ventilación sean muy
diferentes. La otra variable es que la contaminación por partículas crece muy
fuerte en el período de otoño e invierno y disminuye bastante hacia los meses
de primavera y verano”, explicó.
A
esto se debe sumar, en ciudades como Santiago y Concepción, el alto flujo
vehicular, y el uso de leña como combustible, principalmente en el sur del
país.
Las
ciudades interminables
Los
especialistas coincidieron en que las medidas para disminuir el smog no serán
efectivas si no se pone atención a otro factor: la expansión de las ciudades.
En el caso de Santiago, dijo Raúl Morales, iniciativas como vías segregadas y
reversibles, forestación y limpieza de pavimento, no pueden lograr su cometido.
“Todo
eso no ha sido suficiente, porque se sigue aumentando el radio urbano. Esas
medidas hubieran sido estupendas en la medida que se hubiera congelado el radio
urbano. Santiago no puede seguir creciendo en radio urbano, número de
automóviles, etc. A medida que se mejoran las emisiones de partículas, se
empeora por la densificación poblacional. Ese ha sido el drama de Santiago y va
a ser el mismo de muchas ciudades”, advirtió, enumerando los casos de
Valparaíso, Concepción, Temuco y Puerto Montt.
En
este sentido, Paola Vasconi, coordinadora del programa de Medio Ambiente de la Fundación Terram ,
cuestionó el nuevo Plan Regulador Metropolitano de Santiago y señaló la falta
de una política integradora: “Uno no puede aplicar medidas de descontaminación
si no las vincula con otras políticas en la ciudad. Por ejemplo, lo que se hace
en calidad del aire versus la expansión territorial. Hay un problema de cómo se
hace la gestión, no es integral. Cómo vinculamos todas las políticas de
transporte, calidad del aire, expansión de la ciudad, áreas verdes, en función
de mejorar la calidad del aire”, indicó.
La
representante de Terram consideró que la entrada en vigencia de la nueva norma
para MP 2,5 (material particulado más fino) en 2012, además, no asegura mejores
niveles: “Debería haber una mesa de trabajo sobre las medidas que tendrían
iniciarse en 2012 y esa mesa no existe. Las autoridades están apostando a que
las medidas van a ser más eficaces, pero no las están discutiendo con la
sociedad civil”, criticó.
Para
Paola Vasconi, “si no se toman realmente medidas que en general son
impopulares, Santiago no podrá respirar aire de calidad o en base a las
recomendaciones que da la OMS
en el mediano plazo”.
El
informe de la OMS ,
en todo caso, solo trae noticias positivas para pocos, ya que de los 91 países
incluidos, solo once alcanzan los niveles recomendados. Y de las 1.081 ciudades
examinadas, hay 483 que se pueden reconocer como saludables.
Fuente: Terram