Desde
comienzos de septiembre, justo en momentos en que Chile se veía
inundado por declaraciones de arrepentimiento y perdón frente a los
atropellos de la dictadura para imponer el extractivismo, vemos con
indignación que Codelco está ingresando con fuerzas militares
ecuatorianas al cantón ecológico de Cotacachi, Intag, territorio
que hace más de dos décadas viene luchando contra la megaminería
química a cielo abierto por no obedecer a las apuestas de desarrollo
que la comunidad ha acordado.
Codelco
y la empresa minera de Ecuador Enami, no solo han llegado acompañado
de militares, sino que éstos se han mantenido en la zona todo este
tiempo, amedrentando a las comunidades, imponiendo la fuerza de las
armas y provocando a quienes se oponen legítimamente a la
realización de estudios de aire, agua y suelo.
Cabe
señalar que Codelco ya fue expulsada de Intag en 1996, luego en 2011
y es por ello que ahora arremete de la mano de los militares. Nos
parece impresentable que la empresa minera estatal de Chile atropelle
de esta manera la soberanía y el derecho a la libre determinación
de las comunidades indígenas y campesinas que habitan en la
provincia de Imbabura. Según las organizaciones locales “el
contingente militar y policial hace prever que la situación de
militarización en la zona se irá agudizando, como está sucediendo
ya en otros lugares frente a la resistencia de la población. Con
seguridad se levantará un gran dispositivo propagandístico para
acusar a las comunidades locales de rebelión y de terrorismo, con el
propósito de justificar la política extractivista y represiva del
Gobierno.”
Somos
parte de las comunidades que han padecido los embates del
extractivismo; división, contaminación, muerte, depredación
acelerada de los bienes comunes, y por lo tanto con fuerza y decisión
apoyamos a los territorios que defienden el agua y la vida y que,
como en Cotacachi, apuestan por una economía popular y solidaria, el
turismo comunitario-ecológico y la soberanía alimentaria.
Fuerza
Intag, no están solos, nos declaramos en estado de alerta frente al
proceder de la empresa estatal Codelco en territorio
ecuatoriano.